jueves, 21 de febrero de 2008

Hoy lo pude ver, murió este amor, lo vi en tus ojos, llego su fin, sin enterarnos se termino. Hoy vi la verdad, quieres creer que no te importa, pero mentir no hace falta, solo el dolor sana el alma.

Olvidamos que amarse era un acto de fe, olvidamos que amarnos era un pacto con Dios. Nuestro amor se esta yendo en pedazos, se esfuma, se pierde su voz; Nuestro amor se esta yendo al azul de los cielos donde nació, en los manos de Dios.

Tu dices que tu, crees que tu, dijiste esto fue todo y así debe acabar....y dimos tanto...suficiente no fue, nos agotamos, nos rendimos...lo se. Y no disfrutamos amarnos a diario, fingiendo ser fuertes...nos equivocamos, no perduro, es historia de ayer y no entendimos lo que tuvimos...como lo extraño...

("En las manos de Dios"/ Nelly Furtado)

miércoles, 21 de noviembre de 2007

El Rol de la Educación en la Postmodernidad

Para poder realizar una análisis del texto de Ángel Pérez Gómez: ”Valores y tendencias que presiden los procesos de socialización en la época Postmoderna”, extraído del libro La Cultura escolar en la Sociedad Neoliberal, es necesario entender el por qué hablamos de una Postmodernidad, ¿Cuándo pasamos de modernidad a una postmodernidad? ¿Una es continuación de la otra?.

Algunos autores refieren que la Postmodernidad no se puede postular como una época, puesto que ello sólo es posible cuando existe una línea de tiempo ya pasada, cuando se observa hacia atrás, pero sí podemos decir que es la continuidad de la modernidad ( Massei, 2007)

Los conceptos que marcan la postmodernidad son el nihilismo, hedonismo, relativismo y el consumismo, por lo tanto podríamos decir que es la era del “todo vale”. A decir de Nietzsche (1900), que es quien asentó las bases de la postmodernidad, es aquí donde el sujeto se desvincula de lo racional, de lo objetivo. Nietzsche, con su máxima “Gott its tot – todo está permitido” (Dios ha muerto), quiso realizar una crítica a la ciencia, a la moral y a la vida religiosa, que era hasta ese entonces quienes tenían la verdad. Además de existir una serie de cambios a nivel global, como la revolución industrial, que es el hito que generará repercusiones a nivel de organización social, en lo político y que influirá, desde Europa, en la evolución en distintas esferas en el resto del mundo.

Así se generó un sujeto, como bien lo describe Pérez Gómez, basado en una sociedad de mercado, en la que prima el consumismo, la cultura del placer, es decir, para Jorge Peña (El Mercurio, 2007) un individuo acrítico y conformista.

Para J. Baudrillard, la postmodernidad generó un sujeto desvinculado, que está viviendo permanentemente en una hiperrealidad, y que es configurado por objetos, cosas y seducido o entrampado por los medios de comunicación, lo que ha estancado el pensamiento reflexivo, tornándolo débil y sin proyección.

Por lo anteriormente dicho, es como surge un nuevo concepto, el estatus: “cada uno en el lugar que le corresponde, producto de sus esfuerzos”, lo que nos definirá como una sociedad competitiva, hablando de meritocracia y cambiando el eje valórico del “ser al “tener”. Es así como toma fuerza el concepto de “apariencia”, cuando deberíamos fortalecer o trabajar la cultura de lo propio, evitando así que nuestra sociedad se vea limitada en aspectos tan importantes y fundamentales como la creatividad, autonomía, afianzamiento de la personalidad, confianza en si mismo y autosuperación, entre otros.

En el mundo globalizado, no se disfrutan los momentos, el vertiginoso avance de las ciencias y tecnología, el rápido acceso a la información, y gran número de cambios en poco tiempo, terminan por destruir tradiciones, lo que nos lleva a la pérdida del sentido de pertenencia, como bien dice Pérez Gómez, una concepción ahistórica de la realidad, una realidad que nos exige un alto grado de flexibilidad y adaptabilidad al cambio, de lo contrario, somos excluidos de esta.

Por otro lado, y haciendo referencia a Jorge Peña, en su texto “Crítica y rebeldía” (El mercurio,2007) , nos habla de la no conformidad de esta era, el importante rol de la publicidad y la cultura que define a la sociedad actual, “la moda de una religión al cuerpo, donde se orienta la autorrealización del “yo” a un cuerpo que vive para el placer y la satisfacción, ambos conceptos, con carácter de producto. Estamos frente a una cultura que se extiende a lo más, a lo del sábado por la noche y con ello el ensalzamiento de la juventud. La postmodernidad pierde objetivos claros con límites.

Al igual que Jorge Peña, Pérez Gómez nos dice que pasamos de estar centrados en Dios a estar centrados en el ser humano, algo que fácilmente podemos comprobar, basta con recurrir a medios de comunicación para observar los patrones de la postmodernidad descritos por el autor, el surgimiento de nuevos movimientos alternativos o subculturas.

A mi parecer, me es difícil realizar una crítica al individuo postmoderno, más cuando me doy cuenta de que esta descripción de una sociedad frívola, irracional, que ha trastocado sus valores, es en la que me encuentro inserta. Pero no podemos hacer “vista gorda” frente a una problemática que sin duda alguna nos afecta y que , como futuros docentes, tendremos el deber de velar por orientar/guiar a individuos que más tarde formarán parte de los cambios sociales, políticos y económicos, nos sólo de nuestro país, sino que del mundo.

De aquí la importancia de ser profesionales del área educacional conscientes de nuestro rol en la sociedad, con o sin recursos económicos, con o sin el apoyo de entidades superiores, mantener nuestra esencia, luchar por ser auténticos, creativos, ser individuos con opinión, con ideas y objetivos claros, cultivar en nuestros estudiantes la autosuperación, el desarrollo de la creatividad y toma de decisiones. Pienso que es todo cíclico, así como se reciclan modas de épocas pasadas, pienso que en algún momento volverán épocas en que la comunicación familiar sea fundamental, en que el compartir, el preocuparse por el otro sea más importante que ser mejor que el otro, un momento en que podamos despertar del vertiginoso mundo de la información y de la tecnología, y que nos ocupemos más del ser que del deber ser.




Nota: Estimada Profesora María Teresa, al ser esta nuestra última publicación, quiero agradecer por brindarnos este espacio de diálogo honesto y creativo. Debe saber que es una excelente Académica, un ejemplo para todos nosotros. Con afecto, Mónica Fernández M.

lunes, 29 de octubre de 2007

Calidad con claridad

En los últimos 20 años, Chile ha sufrido una serie de cambios políticos, organizacionales y económicos, que han repercutido en la educación, con la consecuente Reforma Educacional.

Para entender el por qué de una Reforma, es necesario remontarse a la década de los años 80, cuando se inicia, y que a pesar de los cambios a nivel gubernamental, perduró en el tiempo, aumentando la cobertura de ella y dejando de lado la educación tradicional, la cual preparaba sólo para los estudios universitarios. A raíz de lo anterior, se ofreció en Chile una nueva alternativa, la educación Técnico Profesional, que más tarde permitió aumentar el gasto en educación, su cobertura, generando una mayor representación del nivel socioeconómico bajo.

En los años 90 se rediseñó el currículo de enseñanza media, se implementó la Jornada Escolar Completa (JEC) y el Programa de Mejoramiento de la Calidad de Enseñanza (MECE), disminuyeron las tasas de deserción, mejoró la infraestructura, estableciéndose objetivos y estándares claros, logrando al año 2003 una nueva Reforma a la Constitución Chilena, aumentando a 12 los años de enseñanza obligatoria; lo anterior, buscando calidad y equidad, y contando con el apoyo de Instituciones privadas y extranjeras como el Bando Mundial.

Si bien las modificaciones a lo que era la Educación Chilena han sido considerables, aun nos vemos enfrentados a deserción de estudiantes de enseñanza media de familias de bajos recursos, lo que nos lleva a cuestionar la eficacia de tales medidas.

La Educación es un tema base en el desarrollo de un país, pues posee implicancias sociales y económicas, toda vez que se involucrada la fuerza laboral. Por lo anteriormente dicho, se implementaron medidas para fortalecer las destrezas laborales, ofreciendo una mejor educación Técnico Profesional, un currículo flexible y estableciendo vínculos con empresas privadas, pero aún así, la demanda de la Educación Técnica Profesional no aumentó, lo cual podría deberse a que es selectiva para el nivel socioeconómico bajo, dificultando la finalización de los estudios, por lo que es fundamental el tener en cuenta las ofertas del mercado y mantener la credibilidad de este tipo de enseñanza. A pesar de lo anterior, debemos rescatar que es un buen ejemplo, por ser contextualizado, es decir, estamos en un país donde aún se valora el trabajo manual.

Haciendo referencia al texto en cuestión, se mencionan como factores para mejorar la calidad de la educación el tratar de uniformar la entrega de educación, mejorar el vínculo profesor-currículo, docentes de mejor calidad, actualizados, (por lo tanto, programas de capacitación adecuados) y articular la Educación Media Técnico Profesional con la Enseñanza Técnica Superior; lo mismo, para las Universidades, que a pesar del aumento de Institutos Profesionales y Centros de Formación Técnica, siguen registrando un mayor número de ingresos.

Si analizamos el sistema educacional chileno de la década de los 90, podemos decir que logró un aumento del número de matrículas y el gasto público en ella, existió una visión nacional y se estableció el Estatuto Docente e incentivos para estos.

Pero, ¿El tema educacional pasa por fortalecer la equidad, los recursos, la implementación, instaurar nuevas políticas? ¿Cuál es el factor fundamental que debemos priorizar o trabajar para lograr una educación de calidad, no solo a nivel nacional, sino en relación a otros países?

Recientemente en un artículo de la Revista “The Economist”, se analizó un estudio de una consultora, que establecía cuáles serían los mejores sistemas de educación del mundo, y en todos ellos se convenía que “un mayor gasto en educación no asegura la excelencia”

A pesar de la variación de niveles educacionales entre los países del mundo, los últimos cinco años han destacado los mismos: Corea , Finlandia, entre otros, y no precisamente por un tema de mayor gasto, sino que ellos se han preocupado de la calidad de los profesores y de otorgar el apoyo oportuno a sus estudiantes rezagados.

Para José Joaquín Bruner (El Mercurio, Octubre 28 de 2007), el gasto en educación es importante para Chile, no así para los países desarrollados y que destacan a nivel mundial, en cambio, a decir de Carlos Beca , Director del CPEIP (El Mercurio, Octubre 28 de 2007) “Las pedagogías deben ser exigentes, por lo tanto, atraer a los mejores estudiantes”.

A mi parecer, el lograr una educación de calidad y que nos permita estar a la par con países desarrollados, sí requiere de inversión, tanto en recursos materiales como humanos, y obviamente de Docentes de Calidad, y no pasa por una mayor cantidad de horas en las aulas, o por tecnología de punta; quizás bastaría con reforzar y dedicarse más a los primeros ciclos de estudio, otorgando una sólida base de aprendizajes (significativos) con mediadores de calidad, y al decir “calidad” me refiero a integridad, individuos con fundamentos , que manejen una amplia gama de conocimientos en diferentes áreas y no precisamente para desempeñarse en la Educación Superior sino que también en la Enseñanza Básica. Por otro lado, establecer lazos con el mundo laboral y saber cuáles son las ofertas del mercado y cómo va evolucionando en relación a mercados internacionales.

sábado, 22 de septiembre de 2007

Evaluación de Aprendizajes

Cuando se habla de "evaluación" se produce un cierto temor, pues sabemos que seremos observados, criticados o medidos por otros, puesto que aún tenemos una visión de evaluación tradicional, la idea de la calificación, de ser aprobados por nuestros profesores, pares y familia. Lo anterior se observó incluso con nuestros futuros colegas, cuando se dispuso la evaluación docente, causando debate a nivel gremial.

En los últimos 20 años se ha intentado cambiar la idea desde una evaluación como una actividad aislada a una en que está presente durante todo el proceso de enseñanza aprendizaje, considerando la construcción de estructuras mentales aprendizajes significativos y contextualizados.

Haciendo referencia a Ahumada (2005), lo anterior se ha visto dificultado al no existir coherencia entre el actuar de autoridades políticas y académicas, y quienes realizan la práctica, es decir, estudiantes y profesores.

Un cambio de visión requiere de tiempo, es así como en el texto analizado se pueden observar por lo menos 20 años entre un enfoque y otro anteponiéndose uno ante otro. Es así, como el nuevo enfoque que se desea poner en práctica se contrapone al tradicional, aquella que se ocupa de logros, resultados y realiza evaluaciones uniformes y no de procesos diferenciados e individuales, aceptando diversidades.

En este contexto surge el tema del instrumento que se utilizará para hacer efectiva la evaluación, existiendo hoy en día una clasificación de ellos, con objetivos diferentes, basados en marcos conceptuales que le dan un carácter determinado, dependiendo de lo que se busque evaluar. Por ejemplo en la Teoría Clásica se busca evaluar habilidades frente a un grupo, es decir, se evalúa respecto a los aciertos de otros.

Al igual que Ahumada (2005), podría hacer mención a una serie de instrumentos según sus teorías, peor el tema de fondo es el que debe existir coherencia, armonía, integración entre los objetivos que se persiguen al evaluar, el contexto, a quién estamos evaluando y quién aplica el instrumento, ya que la evaluación repercutirá en la personalidad, en su capacidad de exploración al entorno, determinando además su inserción en una sociedad cada vez más competitiva y globalizada.

Por lo anterior, es necesario contar con evaluadores capacitados, con implementación adecuada y una gestión coherente con e contexto, contemplando el saber, saber hacer, saber ser y saber convivir (Delors, 1999).
Es fundamental considerar que hoy en día vivimos en un mundo globalizado, y que a futuros nos encontraremos con alumnos-as con una visión mucho más amplia del mundo, pues se nace en una sociedad tecnológica y de información fácil y rápida; por lo tanto es nuestra responsabilidad ir a la vanguardia en metodologías e instrumentos evaluativos acorde al momento, y que faciliten el desarrollo e inserción de nuestros alumnos en ese tipo de sociedad.

La Evaluación


Más de alguna vez nos ha correspondido evaluar una acción, no necesariamente por medio de un instrumento elaborado, quizás solo emitir una opinión, una crítica sobre algo. Lo que no dimensionamos la mayoría de las veces es que aquella evaluación puede ser un reflejo de nosotros mismos.

Las políticas actuales en el área de educación, nos exigen una evaluación que esta inserta dentro de un proceso, el proceso de enseñanza y aprendizaje, y no como un tema aislado, dándonos además directrices para que esta actividad sea acorde al contexto y lo menos sesgada posible, dejando de lado nuestros intereses, individualismos y apropiación de los conocimientos de los alumnos-as.
Pero, ¿Es posible definir a un individuo y/o profesional por la evaluación que utiliza? A decir de Santos Guerra, existe una serie de factores que regulan el proceso evaluativo, entre otros: la gestión política y administrativa, la concepción del propio evaluador, su actitud y principios éticos, el tipo de valor que le da al conocimiento.

Lo anteriormente dicho, es fundamental en el proceso educativo, ya que no debemos olvidar que la evaluación no termina luego de ser realizada, sino que por el contrario, repercute positiva o negativamente en los procesos intelectuales, siendo substancial el criterio del evaluador, puesto que depende muchas veces del supuesto teórico en que se sustenta para definir el tipo de evaluación que realizará, considerando además el que debe existir coherencia entre la gestión y la práctica.

Santos Guerra nos hace reflexionar al cuestionarse ¿Cómo mejorar la práctica evaluativa? … A mi parecer, la evaluación continúa siendo un método de selección de individuos, donde se jerarquiza primeramente en la sala de clases para después reflejarse en la sociedad. Si bien, en los últimos años, nuestro país se ha preocupado de mejorar la calidad de educación y generar programas sociales, estos no favorecen la creatividad o el desarrollo de procesos intelectuales.

Si queremos mejorar las prácticas evaluativos es necesario un trabajo en conjunto con autoridades políticas, académicas, organizaciones sociales y evaluadores, entes conscientes en su quehacer, consecuentes, con adaptabilidad al cambio, creativos, con objetivos claros y con visión de mundo globalizado.

lunes, 9 de julio de 2007

La Didáctica

Para poder definir y entender la didáctica, es necesario estudiar su evolución conceptual, la cual, en algún momento fue considerada como metodología, programación e incluso como sinónimo de currículum (Castro y cols., 2006)

Etimológicamente, didáctica posee definiciones derivadas del griego (didaktiké: enseñar, instruir, etc.) del latín (docere y discere: enseñar y aprender), de la Edad Media (escritos con consejos morales y religiosos) y así sucesivamente hasta la actualidad, en que se ha construido una definición según el contexto cultural y lingüístico que vivimos.

Haciendo Referencia a Brousseau (1986) él nos habla de 3 interpretaciones para esta palabra, como sinónimo de enseñanza, como conjunto de medios para enseñar y como conocimiento del arte de enseñar. Otros autores hablan de didáctica como una disciplina (Mattos, 1963; Gimeno, 1981; Torres, 1992; Rodino, 2004), otros la ven como una ciencia ( Kopp, 1967, Fernández, 1969; Pérez, 1981) e incluso como patrimonio de la cultura de profesores (Barrios, 2000).

Pero, ¿Cuál sería la definición correcta de didáctica? ¿Se puede considerar como un sinónimo de currículum, como se mencionó en algún momento?. A mi parecer, con los contenidos trabajados en la asignatura de Currículum y Evaluación Educacional I es posible construir una definición propia de didáctica, aunque no acabada, pues se entiende que este concepto posee una evolución histórica cultural.

Didáctica: “Ciencia cuyo objeto de estudio es el proceso de enseñanza y aprendizaje, donde el docente debe gestionar recursos materiales y de entorno, para producir situaciones de aprendizaje óptimas para el alumno-a”. Mónica Fernández M. (2007)

…y… ¿Qué es para ti la didáctica?

lunes, 21 de mayo de 2007

Conocimientos Previos en Educación Física

La primera acción propia de un proceso formativo, desde el punto de vista de la teoría del aprendizaje significativo (Ausubel, 1978) es averiguar los conocimientos previos que el alumno presenta antes de iniciar el aprendizaje, y que son a futuro relacionables con los nuevos contenidos a aprender, correspondiendo esto a uno de los factores fundamentales que influyen en el progreso de los alumnos. Lo anterior, es esencial a la hora de ser los guías u orientadores del proceso enseñanza aprendizaje; la manera de aprender, tomando decisiones en forma consciente, facilita y hace posible el aprendizaje significativo ya que se promueve que los estudiantes relacionen lo que ya saben con la nueva información, convirtiendo así a nuestros alumnos en individuos independientes.
Pero, ¿Qué ocurre con la activación de conocimientos previos en áreas ligadas a lo motriz ? Sin duda alguna, la activación de conocimientos previos pertenece más al área del “saber” que del “saber hacer”, es decir, muchas veces, al enfrentar una lectura de un texto, antes de empezar a leerlo, podemos recordar un texto similar o representaciones vistas, que nos hayan gustado y que estén relacionadas con el nuevo texto presentado, facilitando una conexión entre lo sabido y lo que estamos en vías de conocer, utilizando la abstracción.
En el caso de los estudiantes de Pedagogía en Educación Física, que por la naturaleza de ésta, contamos con un Plan de Estudios con una matriz pedagógica y un área de especialidad (en un 80% práctica), el “saber hacer” es elemental a la hora de aprobar estas asignaturas.
Solicitar conocimientos previos de ritmo, juegos, voltereta, rondat, interval training, entre otras habilidades, constituye un punto medular para evaluar la calidad de los conocimientos que tenemos y determinar el apoyo que será necesario durante el proceso.
Sin duda alguna, el papel que juega el desarrollo de habilidades motoras básicas como correr, saltar, lanzar, coger, dar patadas a un balón, escalar, saltar a la cuerda y correr a gran velocidad, es el de asentar las bases de actividades motoras más avanzadas y especificas, como son las deportivas, y que primaron al momento de elegir esta carrera, (como ha ocurrido en la mayoría de mis compañeros entrevistados), permitiendo cursar con éxito los primeros semestres de la Educación Superior
Finalmente, y haciendo referencia a la Teoría del Esquema (Schmidt 1975) quien se basa en el principio o regla general que construye el conocimiento a partir de las relaciones abstractas establecidas entre un conjunto amplio de experiencias motrices, puedo decir que una correcta enseñanza para la comprensión en el ámbito práctico de la Educación Física debe estar dirigida al aprendizaje de los principios o reglas generales del movimiento a través de patrones motores amplios, considerando las habilidades básicas y los conocimientos previos de los alumnos-as y teniendo presente que las conductas motrices pertenecen a un tipo de comunicación en que no existe disociación mente cuerpo.